El portavoz parlamentario de Izquierda Unida, Enrique Santiago, tacha de “limpieza étnica” y “crimen de lesa humanidad” los planes anunciados por Donald Trump de intervenir en Gaza para expulsar de allí a los residentes palestinos.
Santiago considera que “el último anuncio de Trump tras la reunión con el presunto criminal en busca y captura por el Tribunal Penal Internacional por un delito de genocidio Benjamin Netanyahu de apropiarse la Franja de Gaza y expulsar a toda la población palestina es el anuncio de la comisión de un crimen de lesa humanidad, en concreto el traslado forzoso de población”.
Alerta que “al igual que ya han hecho distintos países, España y el conjunto de Estados de la Unión Europea deben pronunciarse de forma inmediata y contundente contra esta inaceptable propuesta para acabar con el pueblo palestino”.
En concreto, el presidente de EEUU describió Gaza como la futura ‘Riviera de Oriente Medio’, ubicada en un sitio ‘fenomenal’, por lo que anunció que ‘Estados Unidos tomará el control de la Franja de Gaza’, que ‘nos pertenecerá en el largo plazo’ y donde el pueblo palestino ‘no podrá volver’, después de que se expulse a más de dos millones de personas a otros países de la región de forma ‘permanente’.
Enrique Santiago denuncia que “Estados Unidos recupera así la política de limpieza étnica que practicó de forma permanente con la población originaria de los Estados Unidos. En su tierra ya impusieron el llamado ‘Sendero de Lágrimas’ en el siglo XIX, con el desplazamiento forzado de tribus americanas para apropiarse de los territorios donde había aparecido oro y otras riquezas”.
“El ‘nuevo oro’ que ha descubierto Trump -apunta Santiago- es una especulación urbanística que pasa por cometer un crimen de lesa humanidad y de guerra, que va a ser financiado por esa inmensa operación urbanística”.
Advierte de que “todos aquellos patrimonios interesados en especular y sacar beneficio con Gaza deben ser conscientes de que se convertirán automáticamente en cómplices de una operación de limpieza étnica y desplazamiento forzado que habrían financiado”.
Estados Unidos confronta con esta propuesta “con todas las resoluciones de Naciones Unidas respecto al conflicto entre Israel y Palestina, cuya doctrina pasa ineludiblemente por el reconocimiento de dos Estados y el territorio palestino histórico”, expone Santiago.
Explica, además, que “el cuarto Convenio de Ginebra de protección a las personas civiles en tiempo de guerra califica como una infracción grave la deportación o traslado ilegal de población”, lo que justifica la valoración de que también se está ante un crimen de guerra.
Igualmente, Estados Unidos deja sin efecto los acuerdos de Camp David y de Oslo, y “lo que todavía es peor, confirma el preludio de una segunda operación de desplazamiento de población y limpieza étnica, esta en Cisjordania, que Israel ya ha comenzado con la anexión de distintas localidades palestinas, todo ello pese a la supuesta tregua en vigor”.
El portavoz parlamentario de Izquierda Unida, Enrique Santiago, tacha de “limpieza étnica” y “crimen de lesa humanidad” los planes anunciados por Donald Trump de intervenir en Gaza para expulsar de allí a los residentes palestinos.
Santiago considera que “el último anuncio de Trump tras la reunión con el presunto criminal en busca y captura por el Tribunal Penal Internacional por un delito de genocidio Benjamin Netanyahu de apropiarse la Franja de Gaza y expulsar a toda la población palestina es el anuncio de la comisión de un crimen de lesa humanidad, en concreto el traslado forzoso de población”.
Alerta que “al igual que ya han hecho distintos países, España y el conjunto de Estados de la Unión Europea deben pronunciarse de forma inmediata y contundente contra esta inaceptable propuesta de acabar con el pueblo palestino”.
En concreto, el presidente de EEUU describió Gaza como la futura ‘Riviera de Oriente Medio’, ubicada en un sitio ‘fenomenal’, por lo que anunció que ‘Estados Unidos tomará el control de la Franja de Gaza’, que ‘nos pertenecerá en el largo plazo’ y donde el pueblo palestino ‘no podrá volver’, después de que se expulse a más de dos millones de personas a otros países de la región de forma ‘permanente’.
Enrique Santiago denuncia que “Estados Unidos recupera así la política de limpieza étnica que practicó de forma permanente con la población originaria de los Estados Unidos. En su tierra ya impusieron el llamado ‘Sendero de Lágrimas’ en el siglo XIX, con el desplazamiento forzado de tribus americanas para apropiarse de los territorios donde había aparecido oro y otras riquezas”.
“El ‘nuevo oro’ que ha descubierto Trump -apunta Santiago- es una especulación urbanística que pasa por cometer un crimen de lesa humanidad y de guerra, que va a ser financiado por esa inmensa operación urbanística”.
