Izquierda Unida, a través de su Comisión federal de Internacional, ha alertado hoy sobre la “actitud dictatorial” demostrada con sus últimas y “peligrosas” actuaciones por el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, que “pueden derivar en un golpe de Estado o en una situación de confrontación entre los poderes democráticos que es necesario impedir y evitar”.
La Comisión Internacional de IU ha desarrollado en un texto de cinco puntos su valoración sobre lo ocurrido en este país en las últimas horas:
1.- Izquierda Unida rechaza la actitud dictatorial del presidente de El Salvador, Nayib Bukele, quien ante un conflicto entre los poderes Ejecutivo y Legislativo, e ignorando la división de poderes propia de cualquier democracia, ha querido doblegar la voluntad de los/as diputados/as con un acto ilegal de autoritarismo muy peligroso, metiendo en el Congreso soldados de uniforme, con chalecos antibalas, cascos y armas largas.
2.- Dicha actitud autoritaria violó la Constitución y supuso un ataque gravísimo a las instituciones democráticas, algo que puede volver a repetirse. Usurpando las funciones del presidente de la Asamblea Nacional, amenazó con disolverla y llamó a una insurrección si los/as diputados/s no votan en el plazo de una semana un importante crédito para un plan de seguridad nacional, que él entiende prioritario.
Ante esta situación, Izquierda Unida manifiesta su respaldo al FMLN y a la Asamblea Nacional por la decisión tomada de no aceptar la decisión del presidente, respetando el marco constitucional del equilibrio entre poderes.
3.- A juicio de IU, lo ocurrido supone un acto ilegal de clara intimidación para forzar una votación a favor de un préstamo que el Ejecutivo salvadoreño pretende solicitar para financiar el llamado ‘Plan de Control Territorial’, con el que Bukele asegura que busca erradicar las altísimas tasas de asesinatos en el país, uno de los más violentos del mundo.
Lo sucedido en El Salvador remite a etapas dictatoriales y de guerra civil muy duras que se creían ya superadas para siempre. Sin duda, los hechos se desarrollaron con la intención de un autogolpe. Que no haya sucedido finalmente no quiere decir que quien está dispuesto a ese actuar hoy así no vuelva a consumar un golpe de Estado mañana.
Bukele tiene, sin duda, todo el apoyo de los EE.UU para desplegar en su país no solo políticas neoliberales y antisociales, sino el autoritarismo que sea necesario para imponer su pretendido ‘orden económico neoliberal’, dar la imagen de reducir la violencia de las maras, pese a llegar a acuerdos con ellas, al tiempo que aumenta el control de la población. Pero ello no le da derecho a imponer su voluntad a través de la coacción violenta, convirtiéndose en un peligro para el sistema democrático.
4.- Rechazamos la actuación cómplice del Ejército y de la Policía Nacional frente a la actitud antidemocrática y golpista del presidente de la República. En sus funciones está el respeto a la Constitución y el no intervenir en política.
De la misma forma, criticamos a la Corte Suprema de Justicia que ante los graves hechos acaecidos debería haber intervenido frenando los excesos cometidos por el presidente. Su silencio no solo fue erróneo, sino cómplice, incumpliendo su deber de actuar desde la independencia del poder judicial.
5.- Izquierda Unida alerta a la comunidad internacional, a la ONU y a la Unión Europea (UE) para que estén vigilantes ante esta grave crisis política. Las actitudes autoritarias y antidemocráticas de Bukele pueden derivar en un golpe de Estado o en una situación de confrontación entre los poderes democráticos que es necesario impedir y evitar.