El coordinador federal de Izquierda Unida, Antonio Maíllo, ha alertado hoy de la “ofensiva por tierra, mar y aire” orquestada por la derecha y la ultraderecha, entre otros “contra el Gobierno en nuestro país, el único no autoritario de corte derechista o no progresista de Europa que sigue en pie”. Lo ejecutan también a través de los “amplios resortes del poder” que controlan en ámbitos económicos, judiciales o mediáticos. Frente a ello “y lo decimos muy claro a la sociedad española, Izquierda Unida no se resigna a que el Partido Popular y Vox lleguen al gobierno de España. Nos jugamos mucho frente a una ola reaccionaria y autoritaria que inunda Occidente, y no estamos dispuestos a que se hagan con todos los resortes del poder”.
Maíllo hizo un resumido balance de algunos de los principales temas políticos y económicos antes del inicio formal de la reunión de la Coordinadora Federal de IU, máximo órgano de debate y dirección que tiene lugar durante toda la mañana.
“No estamos dispuestos -incidió- a asumir una política de brazos cruzados o de resignación que nos parece una irresponsabilidad histórica. No estamos ni dispuestos ni lo asumimos. Por tanto, nuestro compromiso, lo debe saber la gente progresista y de izquierda, es sostener a un Gobierno con todas las contradicciones que se erige en una pieza clave frente a la hegemonía autoritaria y reaccionaria que asola en Europa a la mayoría de sus países”.
Antonio Maíllo destacó que a los partidos de la involución “con todo, no les salen las cuentas” a día de hoy, a pesar del amplio posicionamiento de esas derechas “desde el alto funcionariado, a los cuerpos de seguridad, un amplio espacio de la judicatura, las grandes empresas del Ibex 35 o la mayoría de los medios de comunicación”.
Frente a ello, “la gente trabajadora de nuestro país debe saber que Izquierda Unida es una organización comprometida con la obtención de mejoras y derechos para la vida de la mayoría social”, por eso “no estamos dispuestos a que caiga el poder ejecutivo en sus manos”.
Valoró que “nos encontramos en un espacio y un tiempo en el que no estamos sometidos al agobio ni al estrés electorales” y apuntó que “tenemos una oportunidad única para afrontar con calma, pero también con celeridad, los grandes debates estratégicos y de trabajo político”.
Sin entrar en modo alguno en triunfalismos, el máximo responsable de IU expuso que “en ese ámbito de disputa y de no resignación a que las derechas se salgan con la suya, debemos celebrar los avances y derechos que se produzcan en el ámbito legislativo”.
Se felicitó por el crecimiento del PIB del 3,1% que ha mejorado esta misma semana el Banco de España para 2024, aunque “no debemos olvidar que frente a los datos macroeconómicos existe una pobreza infantil especialmente arraigada y que estamos dispuestos también desde el Gobierno a erradicar”.
Lamentó también el “preocupante contraste entre los datos macroeconómicos y la percepción sobre la realidad; entre las mejoras de carácter laboral y, sin embargo, las dificultades de obtención de vivienda, en un eje que contradice o que neutraliza las conquistas conseguidas”.
Ello no quita el avance en políticas de izquierda, como haber consolidado el impuesto a los desorbitados beneficios de la banca pese a la ofensiva en contra o que esté ya en marcha el debate parlamentario de “la proposición de ley para la regulación de los contratos de alquiler temporales y alquiler de habitaciones o el avance en la reforma integral de la ley de seguridad ciudadana”, más conocida como ‘ley mordaza’.
En medio de estas “medidas de avance legislativo” y de “la disputa que se está produciendo por la articulación de diferentes mayorías”, Maíllo avisó que lo que hacen las derechas es “articularse en la defensa de su ‘patria’, que es la defensa de los grandes intereses corporativos, alejados de los intereses de la mayoría social, como se ha visto en la alianza de PP con Junts y PNV para eliminar el impuesto energético”.
Mientras, se mostró “convencido” de que, entre otras cuestiones, “2025 será el ámbito legislativo donde se avance en las leyes relacionadas con el derecho a adelantar la edad de votación a los 16 años y una la ley de juventud transversal”, que impulsa el Ministerio de Infancia y Juventud que gestiona IU, para así poner “en la prioridad de las atenciones del Gobierno a este importante sector que merece nuestra atención y prioridad”.
Antonio Maíllo no olvidó referirse tampoco al “proyecto y espacio político en el que nos encontramos” a través del Grupo Plurinacional de Sumar, en el que dijo que “seguiremos reivindicando nuestras posiciones políticas y en las que el instrumento de la Mesa de Partidos, estoy convencido, se fortalecerá a lo largo de 2025 para seguir consolidando métodos, prácticas democráticas de consenso y de complicidad” entre las organizaciones que lo componen y que tienen una responsabilidad de gobierno.
