El responsable federal de Organización de Izquierda Unida, Ismael González, ha asegurado esta mañana que las próximas elecciones gallegas del 18F son una buena oportunidad para elegir “entre dos modelos, el modelo privatizador del Partido Popular, que ataca los servicios públicos, y el modelo que defendemos desde Izquierda Unida y Sumar, que pone en el centro la vida de las personas, que pone en el centro esos servicios públicos y la necesidad de defenderlos para cuidar a las personas”.
González considera “importante” que haya serias opciones y que se pueda “desalojar al PP de las instituciones, porque son un peligro para los servicios públicos”; por eso, “si entra Sumar en el Parlamento gallego, sale el PP de la Xunta”, destacó.
El dirigente federal de IU ha puesto en valor durante la rueda de prensa telemática que ha ofrecido la importancia de esos servicios públicos, como la Sanidad Pública que se defendió el pasado fin de semana en una “multitudinaria manifestación” en Galicia, o cuestiones fundamentales como el derecho a la vivienda.
Sobre este último asunto, recordó que la semana pasada “vivimos dos hechos muy desagradables” a partir de dos desalojos en Alicante y Barcelona: “por un lado la agresión policial a nuestro concejal y coordinador de Esquerra Unida del País Valencià en Alicante, Manolo Copé, intentando evitar un desahucio”. Por otro lado, “el desahucio de una persona, una mujer de 78 años en Barcelona, por deber 88 euros”. Dos hechos que le ratificaron en su idea de que “la vivienda es uno de los elementos más importantes de esta legislatura”.
Ismael González alegó que “no es momento para este tipo de respuestas” y ha destacado que desde el Gobierno de coalición “lo que se intenta hacer en esta legislatura y en la anterior es implementar medidas precisamente para evitar el mayor número de desahucios y de problemas habitacionales en todo el país”.
El también coordinador de la Comisión Preparatoria de la XIII Asamblea Federal de IU que culminará en mayo tachó de “mala noticia” que “haya desahucios y también que las personas que intentan evitarlos sean agredidas”.
Además, criticó el hecho de que “a pesar de que hay una Ley de Vivienda desde la pasada legislatura, los gobiernos del PP y de Vox sigan negándose a aplicarla”. Denunció que esto “lo que impide, por ejemplo, es que el reconocimiento de zonas especialmente tensionadas”, con lo que la derecha “evita, por tanto, que se pueda regular y topar el precio, favoreciendo así las políticas especulativas y de encarecimiento de la vivienda”.