El grupo de Unidas Podemos ha puesto de manifiesto y destacado hoy su “compromiso inquebrantable” con la total prohibición de la venta a pérdidas en el campo y el establecimiento de precios mínimos basados en costes de producción reales, aspectos fundamentales de los que es uno de los principales impulsores en el marco del proyecto de reforma de la Ley de Cadena Alimentaria que se encuentra en tramitación en el Congreso de los Diputados.
El grupo ha organizado en la Cámara Baja unas jornadas sobre la Ley de Cadena Alimentaria de cuya apertura se han encargado el portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique; la diputada y portavoz adjunta en la Comisión de Agricultura, Pesca y Alimentación, Isa Franco, y el secretario de Estado de Agenda 2030, además de portavoz adjunto del mismo grupo, Enrique Santiago.
Desde su responsabilidad como miembro del Gobierno, Santiago destacó la relevancia de “la agricultura y de una alimentación sostenible”, mucho más después de que todo el planeta se haya visto afectado por la pandemia del Covid-19. “No se trata solo de un reto mundial, que lo es, sino también es un claro reto de país” y así lo interpretan desde el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.
https://twitter.com/IzquierdaUnida/status/1405858156421521409
Para Santiago, “no hay desarrollo sostenible sin poder acabar con el hambre y sin garantizar la seguridad alimentaria, y para eso es fundamental el trabajo de ustedes”, señaló a los miembros de asociaciones, grupos y colectivos de productores del sector primario presentes en las jornadas.
En su opinión, la sociedad debe recuperar “el valor de la producción frente al de la especulación”, que es donde radican buena parte de los problemas del sector. Para lograrlo, “este país necesita importantes alianzas, un trabajo conjunto con un compromiso por parte de las administraciones públicas y donde se sumen en igualdad de condiciones otros actores como el sector primario, la industria alimentaria y la distribución comercial, para que los que hasta ahora han sido los eslabones más débiles de la cadena dejen de serlo”.
Indicó también que todos los actores de la cadena alimentaria “pero especialmente los productores” han hecho a este país durante todos estos meses de pandemia un “favor fundamental” y han demostrado “que son servicios esenciales, por si alguien lo dudaba”.
“No ha habido desabastecimiento en materia de alimentos en los momentos más duros del estado de alarma”, recordó Enrique Santiago, como sí ha pasado en otros sectores, “y eso ha sido esencial para garantizar la tranquilidad a nuestra sociedad y posibilitar que todos los recursos de las administraciones se volcaran en combatir la pandemia teniendo la retaguardia absolutamente bien cubierta gracias al esfuerzo de todas/os ustedes”.
Por todo ello, tuvo un reconocimiento especial al trabajo que llevan a cabo a diario “no solo las personas dedicadas a la producción, sino también de la transformación y de la distribución de los productos alimentarios”, mucho más teniendo en cuenta que se enfrentan a “la realidad de sus débiles condiciones de trabajo, la precariedad y los escasos márgenes de beneficio”.
“La sociedad siempre, pero más durante la pandemia, ha contraído una clarísima deuda con este sector productivo, que ha garantizado la seguridad humana de todo un país y eso, sin duda alguna, es muy importante y hay que ponerlo en valor”.
Santiago explicó también cómo todo lo que tiene que ver con la cadena alimentaria “tiene una interrelación real y material con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y está integrado en la Agenda 2030”, desde poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria, mejorar la nutrición, conseguir una agricultura más sostenible o defender unas condiciones de vida digna en las zonas rurales de nuestro país”.
El secretario de Estado considera que la reforma de la Ley de Cadena Alimentaria a la que Unidas Podemos está dedicando un trabajo e interés especiales debe ser “un paso más para repartir ese valor de los productos entre todos los eslabones de la cadena”.
“Nuestro objetivo -dijo- va a ser apoyar todos los esfuerzos parlamentarios y de la sociedad civil para garantizar la sostenibilidad de las producciones más pequeñas, fundamentalmente, y conciliar los derechos de productores con los consumidores”.
Por su parte, Pablo Echenique insistió en dejar “meridianamente claro” ante las diferentes organizaciones presentes en las jornadas el “compromiso inquebrantable” de Unidas Podemos “de llegar hasta el final y dejarnos la piel para conseguir objetivos” como la prohibición de la venta a pérdidas. “Tenemos clarísimo la importancia de este tema para el sector y para el país. Y nosotros podremos tener muchos defectos, pero nunca nos equivocamos de lado”, sentenció,
El portavoz del grupo tachó de “vergüenza” los precios en origen de los productos alimentarios, y no solo por la “impactante diferencia” entre el precio que se paga al productor y el precio en el mercado, que llega en muchas ocasiones al 800%.
“Son una vergüenza fundamentalmente -dijo- porque los precios que se pagan en origen son tan bajos que ponen en peligro la viabilidad económica de las explotaciones y la economía familiar de las personas que dependen de ellas. Son tan bajos que en muchas ocasiones los productores tienen que vender el producto por debajo del precio que les cuesta producirlo, por debajo del precio de coste. Es decir, tienen que vender el producto perdiendo dinero para no tener que desecharlo y perder todavía mucho más”.
Mientras, la diputada Isa Franco consideró que el sector primario debe ser el “más cuidado” por el Gobierno, ya que “sostiene” a toda la población. Indicó también que la venta a pérdidas “no es una situación menor, sino que se carga al sector primario. Tenemos la obligación de defenderlo para tener un campo con más derechos, con mayor población y, sobre todo, para tener una cadena alimentaria fuerte y ser referentes de la mejor forma de producción y de alimentar a nuestra población y al mundo”.
Franco entiende que para conseguir precios justos “necesitamos que los agricultores y ganaderos vuelvan a salir a la calle. Su fuerza es fundamental”. Se felicitó por los contenidos que Unidas Podemos está consiguiendo introducir en la reforma de la ley, aunque reconoció que “faltan” cosas importantes, como que la regulación “se amplíe” a todos los países, “más allá” de la Unión Europea, acabar con la “deficiencia económica” y lograr que se introduzcan unos indicadores de precios y costes públicos “que sirvan como referencia en contrato, porque será la única manera de impedir que se siga vendiendo a pérdidas”.