Izquierda Unida, a través de su secretario federal de Organización, Ismael González, ha remitido una carta al ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, para denunciar la escalada de “ataques y amenazas a cargos públicos y sedes” que soporta esta formación en los últimos meses.
González traslada al máximo responsable de la seguridad pública que “creemos que es importante que se investiguen estas agresiones para estudiar posibles soluciones” y añade que “entendemos que es necesario garantizar la seguridad de los cargos públicos que desempeñan sus funciones de representación en diferentes ámbitos e, igualmente, evitar que se sigan produciendo incidentes de este tipo”.
Distintas personas vinculadas a Izquierda Unida, así como sedes de esta organización en varias localidades, principalmente de Murcia, País Valencià, Extremadura y Castilla y León, han sido objeto de agresiones y actos de diferente naturaleza.
“Es evidente -se añade en la misiva- que el clima de tensión y violencia que está promoviendo la extrema derecha en nuestro país tiene ya consecuencias graves sobre personas concretas”, si bien Izquierda Unida deja constancia de que “no es la única organización política de izquierdas que está sufriendo ataques a sus sedes y sus cargos públicos”.
El secretario federal de Organización de IU está en permanente contacto con los/as responsables de sus federaciones en todo el Estado para recibir información de los casos más graves que se producen. En todo este tiempo, ha trasladado también el “total respaldo” de la dirección federal a las personas y asambleas locales que han sido víctimas de estos hechos.
En la carta que ha remitido al titular de Interior, Ismael González cita uno de los últimos casos, sufrido por el concejal del municipio burgalés de Miranda de Ebro, Guillermo Ubieto. Explica como el edil de IU ya denunció el pasado mes de mayo las “reiteradas amenazas recibidas a través de Facebook por un ultraderechista”, llegando a recibir un mensaje con la intención de “cortarle el cuello con un cuchillo de 25 centímetros”.
De los mensajes de odio, denunciados puntualmente en la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía, se pasó a que el pasado 9 de junio una persona encapuchada escalara por la fachada y accediera al balcón de la vivienda de Ubieto para arrancar unas banderas. Apenas tres días después, el viernes 12, unos desconocidos rompieron los cristales de su vehículo.
El responsable federal de Organización de IU adjunta en su carta a Grande-Marlaska todas las denuncias presentadas por este caso y, al tiempo que pide las medidas oportunas para “garantizar la seguridad” del concejal de Miranda de Ebro, reclama “otras que permitan prevenir y evitar agresiones o amenazas a cargos públicos y a sedes de organizaciones políticas de izquierdas”.
Ismael González se pone a disposición del ministro de Interior para mantener desde IU todas las reuniones que considere oportunas con este departamento para hacer frente a situaciones como la referida antes de que puedan agravarse en el futuro.
En esta misma línea, el coordinador general de Izquierda Unida de Castilla y León (IU-CyL), Juan Gascón, solicitó esta semana una reunión con el delegado del Gobierno en esta comunidad. Además del caso del concejal Guillermo Ubieto, advirtió también del hecho de que en algunas localidades castellano-leonesas “donde la campaña contra nuestras y nuestros cargos públicos está siendo más agresiva” la víctima es una concejala, apareciendo “un componente machista que la hace mucho más repugnante”.