
Izquierda Unida ha tenido conocimiento de las muy serias amenazas, constatadas, que vienen soportando desde hace meses el Partido Comunista Colombiano (PCC), la Juventud Comunista (JUCO) y la Unión Patriótica (UP) de Medellín, Antioquia, organizaciones que vienen sufriendo en ese país de manera continuada la violencia sistemática ejercida por grupos paramilitares de ultraderecha desde hace décadas.
Expresamos toda nuestra solidaridad con estos partidos hermanos que llevan en el objetivo de grupos paramilitares muchos años. Se trata de un auténtico genocidio político contra estas organizaciones que trajo como consecuencia miles de desaparecidos y asesinados de estas organizaciones, viéndose otros muchos obligados al desplazamiento interno o al exilio.
Solicitamos al gobierno colombiano la inmediata apertura de una investigación contra los autores de estas amenazas, así como la adopción de las medidas necesarias y suficientes para proteger la vida de dirigentes y militantes de estos partidos en Antioquia, así como la apertura de una investigación por parte de gobierno y de los órganos competentes del estado: policía, Fiscalía General de la Nación, Unidad Nacional de Protección y otras administraciones departamentales, para que se actúe de forma rápida y efectiva garantizar la seguridad y el pleno ejercicio de los derechos políticos y constitucionales de la militancia de estas organizaciones.
De la misma manera, Izquierda unida informará de estas amenazas en el Congreso de los Diputados de España y pedirá el apoyo del Gobierno español al colombiano para acabar con el paramilitarismo.
Recordamos que la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos del 30 de enero de 2023 reconoció el exterminio político contra la Unión Patriótica como un crimen de estado y ordenó al estado colombiano a garantizar la protección efectiva e integral de los militantes del PCC, la JUCO y la UP. El incumplimiento de estas obligaciones por parte de las autoridades constituye una responsabilidad grave y una afrenta a la justicia internacional.
Manifestamos toda nuestra solidaridad internacionalista con las compañeras y compañeros amenazados, y expresamos nuestro total apoyo a su legítima lucha al servicio de la clase trabajadora y la mayoría social colombiana, así como por un país democrático y soberano, donde la violencia y la explotación sean desterrados.
La lucha de estas organizaciones de la izquierda colombiana que durante años han soportado valientemente el acoso de la violencia paramilitar, es una lucha por la paz y la democracia, por el socialismo y por una Colombia que no sea de las élites, con plenos derechos para todos.
En esa lucha, las compañeras y compañeros nos tienen de su lado, en el apoyo más solidario y la fraternidad más leal y convencida.