El actual eurodiputado de Izquierda Unida y vencedor en el proceso interno de primarias recién concluido para elaborar la candidatura de esta formación de cara a las próximas elecciones europeas de junio, Manu Pineda, hace un claro llamamiento a reforzar una izquierda “fuerte y sin complejos para plantar cara al belicismo y la austeridad de la Unión Europea”.
Pineda, proclamado cabeza de lista de IU para los comicios al Parlamento europeo tras conseguir IU el 64,89% de apoyos de la militancia que votó en la consulta se ha mostrado “muy satisfecho” con el resultado y felicita especialmente a “la militancia de oro” de Izquierda Unida, por su participación en todo el proceso.
El dirigente recuerda que el conjunto de la lista de Izquierda Unida “representa la pluralidad y la diversidad de la organización”, al tiempo que remarca que “vamos a ir al Parlamento Europeo para sostener el hilo rojo de la historia, que tiene que comprender también la lucha por el ecologismo, el feminismo y la paz”.
En este sentido, Manu Pineda recuerda que es el momento de “conseguir amplias alianzas para defender en Europa los derechos de la clase trabajadora”.
Incide también en que las elecciones europeas son “trascendentales”, mucho más “en un momento de auge de la extrema derecha, del intento de imposición de nuevo de la austeridad y de las tesis belicistas”. Ante ello, resulta “necesario reforzar un proyecto de izquierda fuerte y sin complejos en el Parlamento Europeo, que ponga en el centro las luchas de las clases populares”, destaca.
Pineda, sindicalista y soldador ferroviario de profesión, llegó al Parlamento europeo en 2019 tras una larga trayectoria como activista por los Derechos Humanos. Especialmente vinculado a Palestina, residió en Gaza entre 2011 y 2014, donde intervino como escudo humano y conductor de ambulancias.
Durante esta legislatura ha destacado por su defensa del pueblo palestino, saharaui o cubano, entre otras, desde la presidencia de la Delegación para las Relaciones con Palestina de la Eurocámara, y las vicepresidencias del Intergrupo de Solidaridad con el Sáhara y del Grupo de Amistad con Cuba.
Entre las principales iniciativas defendidas en Bruselas están que la Unión Europea compensase las ventas a pérdidas de los agricultores comunitarios, la solicitud de una investigación exhaustiva sobre la situación del Parque Nacional de Doñana, la defensa de las condiciones laborales de los temporeros en España o la proliferación de macrogranjas de porcino en nuestro país.