El portavoz parlamentario de Izquierda Unida y portavoz adjunto de Unidas Podemos, Enrique Santiago, ha distinguido hoy con rotundidad entre la “legítima lucha por la liberación del pueblo palestino, que es la lucha contra un sistema de ‘apartheid’, un sistema discriminatorio”, que nada tiene que ver “y en absoluto debe ser asimilado o representado como una especie de representación de odio a los judíos, ni muchísimo menos”.
Santiago hizo esta valoración durante su intervención para presentar la jornada ‘Memoria del Pueblo Palestino’, celebrada en dependencias del Congreso de los Diputados organiza por el grupo de Unidas Podemos, y en cuyo arranque intervino también la diputada Lucía Muñoz.
El diputado y dirigente federal de IU definió el objetivo del encuentro como de “apoyo al pueblo palestino y también para analizar el antisemitismo como excusa para perseguir la solidaridad”.
“Desde Unidas Podemos -explicó- creemos que hay que diferenciar claramente entre el antisemitismo, al que hay que combatir, y la legítima oposición al sionismo como una ideología colonial que mantiene una ocupación ilegal de territorios conforme a los pronunciamientos y las resoluciones que en innumerables ocasiones y desde hace décadas viene emitiendo Naciones Unidas”.
Lamentó que estemos ante “un momento de confusión” en el que “desgraciadamente lo que se está olvidando es que la mayor amenaza de antisemitismo proviene precisamente de la extrema derecha mundial”. Recordó que es “la que ha perseguido y sigue persiguiendo al pueblo judío, en general, y la que viene utilizando todo tipo de teorías conspiranoicas para avanzar en este antisemitismo radical”.
Santiago realizó una introducción teórica pero también pegada a la actualidad. Advirtió que “ante un posible gobierno de coalición con una influencia de la ultraderecha más que en cualquier otro momento de la historia del Estado de Israel, debemos trabajar aún más este combate contra todo lo que tenga que ver con la discriminación del pueblo palestino ocultado en esas supuestas campañas antisemitas”.
Confirmó también que desde IU y Unidas Podemos “vamos a trabajar en el Congreso de los Diputados en favor de la defensa de las definiciones y posiciones rigurosas” y para “combatir el intento de trasladar aquí una especie de legislación para convertir en delito las campañas de oposición a las políticas de ‘apartheid’ que lleva adelante el Gobierno de Israel”.
Avisó de que esto se hace “incluso con una proposición de ley que ha llegado al Congreso impulsada probablemente por una de las asambleas legislativas de este país que está en manos de una de las derechas más reaccionarias, la Asamblea de la Comunidad de Madrid”.
“No vamos a dejar que ningún tipo de acusación malintencionada intimide a las actuaciones de solidaridad con el pueblo palestino, sobre todo cuanto tenemos que poner la atención en el peligro y la amenaza real para el pueblo israelí que representa el crecimiento de la extrema derecha en Europa y en todas partes”, destacó.
El portavoz adjunto de Unidas Podemos insistió en que “nos preocupan esos debates que se están dando en el seno de Naciones Unidas, por ejemplo, entre la adopción de determinadas definiciones de antisemitismo que pueden dar lugar a una utilización política para acabar persiguiendo las legítimas aspiraciones del pueblo palestino y para confrontar con las campañas de oposición al sionismo”.
Señaló que existen “muchos académicos, activistas y figuras políticas israelíes de origen judío que son, además, impulsores del movimiento de solidaridad con Palestina, incluyendo a importantes organizaciones defensoras de los derechos humanos en Israel. Son organizaciones valientes en su oposición a las acciones represivas del régimen de Israel”.
Por el contrario, lamentó que “vemos el comportamiento de los representantes diplomáticos de Israel en los espacios internacionales, en especial el embajador ante Naciones Unidas, y nos parece que hay toda una política por confundir esas críticas legítimas a las políticas que realiza un país o criminalizar la solidaridad con el pueblo palestino”.
Por ello, tachó de “sorprendente” que “las autoridades de Israel pretendan tener una especie de patente de corso en cualquier tipo de actuaciones que son de irrespeto o vulneración del Derecho internacional”, lo mismo sobre que “pueda haber sectores de la sociedad o instituciones internacionales que asuman esa patente de corso o que Israel pueda llevar adelante actuaciones que son auténticos crímenes de guerra o crímenes de lesa humanidad”.
Enrique Santiago propugnó un “frente amplio antirracista, juntando a todos los que estén en la mira de la extrema derecha, para combatir el antisemitismo y también la islamofobia y todas las narrativas de odio en general”.