Izquierda Unida ha elaborado una moción para que sea debatida en todos los plenos de los ayuntamientos en los que tiene representación en la que insta al Gobierno a “dar un giro” en su política migratoria para que no se repita un “episodio tan doloroso” como la muerte de más de una treintena de personas migrantes en la valla de Melilla cuando pretendían traspasar la frontera entre Marruecos y España.
Entre otras cuestiones, el texto plantea en su parte dispositiva que los plenos municipales insten al Ejecutivo a la “revisión de los acuerdos en materia migratoria entre España y Marruecos”, lo que incluye “suspender inmediatamente la financiación a Marruecos en materia migratoria” hasta que haya garantías de que se cumple estrictamente la legalidad y no se vulneran los derechos humanos.
La moción ha sido elaborada de forma coordinada a través de las responsabilidades federales de IU de Política Municipal, de Política Internacional y su Red federal de Migraciones. Reclama también a los/as responsables competentes del Gobierno en la materia de la que se trata que muestren su “solidaridad con las familias de las víctimas, exigir que se identifique adecuadamente y se garantice la repatriación de los cuerpos”, así como “solicitar información urgente del estado de los heridos al Gobierno de Marruecos para trasladar a España a quienes requieren atención médica”, tras la ayuda de primera mano recibida en territorio marroquí.
IU apunta que lo ocurrido la semana pasada es consecuencia de “una política migratoria que ya ha provocado en el pasado episodios que claramente violan los derechos humanos más fundamentales: concertinas, devoluciones en caliente, palizas a personas migrantes, pero que en estos momentos arroja un saldo de muertes y violencia inasumibles”.
Lamenta que a falta de informaciones oficiales más fluidas y decididas hayan tenido que ser “de nuevo las Organizaciones No Gubernamentales que trabajan en la zona las que han retratado y denunciado la violencia con la que han tratado las fuerzas de seguridad marroquíes a estas personas”.
De la misma forma, Izquierda Unida denuncia que de poco ha servido de cara a mejorar la política migratoria que Pedro Sánchez aceptara “la propuesta de Marruecos para el Sáhara Occidental, lo que constituye una flagrante vulneración de las resoluciones de la ONU y una traición a la causa saharaui”. Todo lo contrario, “con las decisiones unilaterales del presidente del Gobierno se ha reforzado la política de autoritarismo del Gobierno marroquí, la impunidad de su gendarmería de fronteras y la violación sistemática de los derechos humanos en la valla de Melilla”.
“España y el conjunto de la Unión Europea son responsables directos de esta situación a través de los acuerdos en materia migratoria que se mantienen con Marruecos, que entre otras cosas financian a las fuerzas especiales de la gendarmería que ejercen las tareas de control migratorio”, completa el texto el razonamiento.
La moción recoge también la propuesta que IU lanzó horas después de conocerse lo sucedido en la valla de Melilla para que los ayuntamientos insten al Gobierno a que “ponga en marcha una investigación sobre los hechos que dirima las responsabilidades tanto en España como en Marruecos”.
Los/as responsables de IU de Política Municipal, Política Internacional y de la Red federal de Migraciones plantean también acabar con las devoluciones en caliente y que se impulsen los trabajos para conseguir que en la Ley de Seguridad Ciudadana se derogue toda la parte sobre estas prácticas y donde se recogen aspectos que atañen a la política migratoria.
En los trabajos que se llevan a cabo en la actualidad para concretar un profundo cambio de la también conocida como ‘ley mordaza’ ya se ha logrado un acuerdo, impulsado en buena medida por Unidas Podemos, para eliminar de su texto los puntos que tienen que ver con estas actuaciones directas sobre las personas migrantes en la frontera.
Izquierda Unida deja claro en su moción que “ni las devoluciones en caliente, ni las concertinas, ni amparar desde la política exterior la represiva y carente de toda cautela de derechos humanos política de fronteras del Estado marroquí pueden formar parte de las políticas de un Gobierno garantista de los derechos más básicos de las personas”.