El eurodiputado de Izquierda Unida Manu Pineda cree que “PP, Ciudadanos y VOX deberían asumir de una vez por todas que la UE está en contra del bloqueo de EEUU a Cuba”. “La Posición Común de Bruselas es esa, no la del expresidente Aznar, al que tanto añoran y al que llevan a sus convenciones a pasear su racismo”, añade.
Esa posición vuelve a quedar plasmada en una carta que el Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, envió la semana pasada a Pineda y a la eurodiputada del PCP, Sandra Pereira.
“La posición de la UE es conocida y firme en su rechazo al embargo estadounidense en todos sus elementos y a favor de su levantamiento. Así lo hemos expresado la UE y yo mismo en reiteradas ocasiones, no sólo en el contexto del debate anual de la ONU, sino también en otros contextos multilaterales o bilaterales, incluido en conversaciones con nuestros socios estadounidenses”, escribe Borrell en su carta.
Pineda y Pereira escribieron a Borrell el pasado verano, después de que el Alto Representante criticara duramente la actuación del Gobierno cubano durante las protestas. El eurodiputado de IU, sin embargo, cree que, el de la última carta “debería ser el tono habitual” del jefe de la diplomacia europea. “Estoy seguro de que a estas alturas el señor Borrell ya sabe que las protestas pacíficas y legítimas del verano pasado” por la escasez de bienes básicos “fueron instrumentalizadas por algunos sectores para generar altercados con la Policía cubana”.
“Está claro -continúa- que sin el bloqueo permanente e ilegal de EEUU, el abastecimiento en Cuba podría producirse en mejores condiciones”. De hecho, Borrell replica que ya le ha transmitido a EEUU las medidas que puede tomar para aliviar esa situación, “especialmente en lo que se refiere a las remesas y a los viajes.
“Tengan la seguridad de que tanto mi equipo como yo seguiremos abogando por el levantamiento del embargo en su totalidad y, en particular, de sus elementos extraterritoriales. La UE considera que dichos elementos son incompatibles con el derecho internacional y que la activación de los Títulos III y IV de la Ley Helms-Burton supone una clara violación de los acuerdos de 1997 y 1998 con Estados Unidos”, asegura Borrell.