El coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón, considera que del contenido y la forma en que se han aprobado en el Parlamento los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2021, junto a una serie de normas importantes como la reciente Ley de Eutanasia, se pueden sacar dos conclusiones fundamentales, que “existe un Gobierno de coalición estable y consolidado” y el “radical fracaso de la derecha en su estrategia para acabar con él”.
Garzón ha abierto esta mañana la reunión telemática de la Coordinadora Federal de IU -máximo órgano ejecutivo de dirección- con la exposición de su Informe Político. Ha hecho balance del 2020, que ha calificado de “difícil”, pero del que también se pueden sacar importantes lecciones positivas. Entre ellas, destacó especialmente “que teníamos razón cuando apostamos por la participación en la confluencia de Unidas Podemos, en la participación en el Gobierno de coalición y en habernos mantenido firmes frente a los ataques de la derecha”.
El ministro de Consumo desgranó estas ideas a lo largo de una intervención que se ha podido seguir en abierto a través de los canales habituales de la organización. En relación al Gobierno, señaló con normalidad que tanto éste como las formaciones que lo integran “no tienen una homogeneidad de pensamiento”, pero sí “tenemos articulado un trabajo en común” que lleva a que “el diálogo crezca y sea positivo”. Restó importancia a las críticas externas injustificadas e indicó que “la cultura política de este país debe entender que esto es normal”.
Insistió en que según ha avanzado este primer año de vida del Ejecutivo se ha demostrado no solo su “mayor consolidación y estabilidad”, sino que la apuesta por él desde el seno de Unidas Podemos “es positiva y viable” y, no menos importante, “que es rotundamente falso que Unidas Podemos le aportara inestabilidad”.
Ha sido así “tras un año marcado por la pandemia y con una oposición tremendamente violenta en términos discursivos y que ha alentado posiciones antidemocráticas”.
En este marco, se mostró optimista por el efecto que tendrá para España que los fondos europeos para combatir los efectos económicos, sociales y sanitarios del Covid-19 “ya estén disponibles”, después del bloqueo que realizó la extrema derecha europea a través de Polonia y Hungría.
En su doble análisis también como miembro del Gobierno, apuntó que estos fondos suponen “un hito importante que va interrelacionado con los Presupuestos Generales”. Permitirán en conjunto “desplegar líneas de trabajo vinculado a la mejora del ‘escudo social’, y avanzar hacia la reindustrialización y hacia un nuevo modelo productivo”.
Garzón señaló rotundo que los PGE “marcan una línea progresista” y en ellos “se nota la impronta de Unidas Podemos e Izquierda Unida”, lo que va a ser importante para avanzar en la “protección de la mayoría trabajadora y el cambio de modelo”.
El coordinador federal de IU aludió en varias ocasiones al hecho de que las cuentas públicas estatales para 2021 “han sido aprobadas por una mayoría superior que los votos de investidura”. Incluso ha habido leyes como la de eutanasia -de la que recordó que “desde Izquierda Unida tratamos de sacar adelante ya desde 1998”-, que “han tenido más apoyo aún que los Presupuestos”.
“Detrás de eso está lo que llamamos ‘alianza republicana’, que forman unos partidos que comparten un deseo de construir una cultura política de más democracia y la visión de un país plurinacional”.
Enfrente se sitúan unas formaciones de las derechas “que confunden el deseo con la realidad”, entre las que está incluido un Partido Popular del que Garzón espera que “sepa escaparse de una extrema derecha que condiciona permanentemente su discurso”.
Advirtió de que esta impotencia de la derecha española para desvincularse de las posiciones más extremistas lleva a que el partido de Pablo Casado tenga “un amplio arraigo sobre tradiciones antidemocráticas, que se quede solo en el Parlamento y que no sepa escuchar las demandas del país”.
Alberto Garzón alertó de que esta derecha “seguirá atacando a este Gobierno”, para lo que se seguirá valiendo de “las distintas instituciones en las que ha penetrado”. En su opinión quieren “bloquear las vías de progreso y modernización de este país”.
El máximo responsable de Izquierda Unida dedicó otra parte de su intervención a la XII Asamblea Federal que esta organización tiene previsto culminar en el mes de marzo próximo “y que esperamos no tener que volver a aplazar por el Covid”.
Recordó que desde la última Asamblea -celebrada en 2016 y en la que fue elegido coordinador- “han pasado muchas cosas”, entre ellas la “consolidación del espacio de Unidas Podemos”. Garzón considera que en el seno de IU, dentro de la pluralidad existente, “tenemos una misma música común en la apuesta por reforzar la confluencia y por su consolidación territorial y en ámbitos de la sociedad civil”.
“Refuerzo de la confluencia de Unidas Podemos -dijo- y refuerzo de la capacidad organizativa de Izquierda Unida y de la conexión que nuestra fuerza política tiene con la sociedad”.
Garzón llamó a su vez a todos/as los/as miembros de la Coordinadora Federal a que en el debate que tiene lugar en la reunión de hoy se analice también “con rigor, solvencia y compromiso” nuestra participación en el Gobierno y en todas las instituciones”.