
La responsable de Organización y portavoz federal de Izquierda Unida, Eva García Sempere, ha hecho una primera valoración del claro triunfo de la derecha en las elecciones en Alemania y ha asegurado que “desde luego no tenemos motivos para la euforia con estos resultados”. Al tiempo, ha “saludado y felicitado” a la formación de la izquierda alternativa Die Linke por la “notable subida de votos, pero también de afiliación” que ha conseguido, aunque ha constatado también que “el nuevo Gobierno alemán estará liderado por la derecha” que encabeza la CDU de Friedrich Merz.
Esto lleva a dos mensajes diferenciados: uno, positivo, si la derecha cumple “el anunciado cordón sanitario hacia la extrema derecha, que saludamos y esperamos que el Partido Popular en algún momento también se una a hacerlo en nuestro país”, en referencia a los continuos acuerdos y guiños del partido de Alberto Núñez Feijóo a los ultras de Vox.
Sobre el segundo, más negativo, destacó que “no se nos escapa el gran corrimiento que ha tenido esta derecha alemana hacia las posiciones ultras, las más cercanas a Alternativa por Alemania en materia, por ejemplo, de migración”. Es decir, el nuevo Ejecutivo alemán se tendrá que conformar en un panorama político “con una extrema derecha fuerte y una derecha que asume y abraza los postulados de la extrema derecha también en Alemania”, lo que reconoció “vemos con preocupación”.
En relación de nuevo al resultado de Die Linke “una fuerza hermana de Izquierda Unida con la que compartimos nuestro espacio político europeo en el seno del Partido de la Izquierda Europea (PIE)”, Eva García Sempere recordó en la rueda de prensa telemática de los lunes que “viene de dificultades en el último periodo, con la escisión que tuvo, pero sin duda salen mucho más fuertes de este proceso electoral”.
La formación de izquierdas ha superado ampliamente las previsiones que le daban las primeras encuestas, además de “convertirse en la primera fuerza entre los más jóvenes” en muchas zonas, “y eso, sin duda, es desde luego un síntoma muy esperanzador”.
Garcia Sempere apuntó que desde Izquierda Unida “también extraemos algunas conclusiones” de lo ocurrido en este espacio: “en primer lugar, la izquierda cuando va separada es más débil, consigue unos resultados que dan por debajo de lo óptimo y de lo que permitiría ser clave en el Gobierno”.
Pero también, y a propósito de esa izquierda escindida que representa el partido de Sahra Wagenknecht, que ha logrado unos pírricos resultados, destacó que “cuando las izquierdas asumen el marco xenófobo de la ultraderecha, generalmente lo que hacen es reforzar a esas fuerzas de ultraderecha y, como hemos visto, no conseguir los resultados esperados”.
La campaña «a estudiar» de Die Linke
“Y otra reflexión, creo que hay que estudiar la campaña que ha hecho Die Linke, alrededor de la vivienda y de la justicia fiscal, pero sin olvidar también los derechos de las personas migrantes y planteándose como una fuerza netamente antifascista, que lo es”, apuntó.
La portavoz federal de IU considera que “frente a una socialdemocracia y unos Verdes a quienes les temblaron las piernas cuando se instaura el marco del debate alrededor de la migración”, Die Linke “ha conseguido convertirse en ese referente antifascista, para las feministas, los jóvenes y para los ecologistas”.
Aplicado todo esto al caso de España, Eva García Sempere comentó que “venimos tomando nota de estas cuestiones y, precisamente, el impulso a la ‘Convocatoria por la Democracia’ tiene que ver con esto. Queremos cambiar el estado de ánimo y entender que no hay nada inevitable. No es inevitable el ascenso de la extrema derecha y debemos trabajar sin descanso, especialmente para ofrecerle una alternativa que ensanche derechos y hable de aquello que interesa a la población y a la mayoría social”.