La responsable federal de Organización y portavoz de Izquierda Unida, Eva García Sempere, considera que el Gobierno de coalición puede gobernar con los Presupuestos Generales del Estado (PGE) prorrogados, pese a la continua “amenaza” de la derecha independentista catalana de Junts. Reconoce que no es el “escenario ideal”, aunque ha destacado la posición defendida por IU y ratificada el pasado sábado en la reunión de su Coordinadora Federal -máximo órgano de debate- de “no dar esta batalla por perdida en ningún caso”.
A preguntas de los medios en una rueda de prensa telemática, García Sempere explicó que IU quiere unas nuevas cuentas públicas este año “que permitan hacer nuevas medidas que mejoren la vida de la clase trabajadora, pero sin duda se puede gobernar con presupuestos prorrogados”.
“Por nuestra parte -dijo- vamos a trabajar con todas las fuerzas” en el espacio Plurinacional de Sumar y “con todos aquellos grupos que conforman el bloque de investidura para que haya Presupuestos Generales”. Es la mejor manera y la más efectiva para que “podamos seguir avanzando en las medidas sociales tan necesarias para nuestro país en materia de inversiones, pero hablamos también de Sanidad, de Educación o de Vivienda”, completó.
García Sempere no abundó en lo que conllevan esas “amenazas” que reeditó la semana pasada Carles Puigdemont. Éste avisó de que no negociará las cuentas públicas ni ninguna otra medida después de que la Mesa del Congreso retrasara su decisión sobre la proposición no de ley que registró Junts en diciembre -que algunos entienden como una especie de moción de confianza camuflada- pero que en realidad es una exigencia para que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el único que realmente puede presentarla, lo haga de inmediato. La derecha catalana lo ve como la mejor manera de evitar el desgaste de apoyar públicamente una moción de censura auspiciada por PP y la extrema derecha de Vox.
También a preguntas de los medios sobre uno de los tres decretos-ley que se debatirán el próximo miércoles en el Congreso -el referido a la reforma aprobada por el Gobierno, sindicatos y patronal sobre puntos específicos del sistema público de pensiones para reforzar su solidez-, la portavoz de IU informó que la Colegiada de IU iba a debatir este tema en su reunión habitual de los lunes.
Destacó que, como ha hecho siempre, Izquierda Unida seguirá “con la defensa de las pensiones como un derecho y también con la defensa de las mejores condiciones laborales y sociales de la clase trabajadora”.
Eva García Sempere valoró también “muy positivamente” la reunión y el acto público sobre la reducción de la jornada laboral del pasado viernes, en el que intervino el coordinador federal, Antonio Maíllo, en representación de IU junto a todas las organizaciones políticas representadas en la coalición de Sumar.
Incidió en que “participamos de manera horizontal, reconociéndonos en pie de igualdad y trabajando juntas para sacar una agenda de medidas sociales que mejoren la vida de la clase trabajadora, que es sin duda nuestro objetivo”. No dudó en mostrar su “satisfacción”, ya que “justamente esto es lo que desde Izquierda Unida hemos venido defendiendo desde el principio de la legislatura y no nos cansaremos de defender”.
Fortaleza actuando unidos
“Nuestra mayor fortaleza viene -añalizó- de la misma fortaleza de las organizaciones políticas que conformamos y trabajamos conjuntamente en este espacio para poner una agenda de reconstrucción democrática con medidas que garanticen derechos y hagamos el reconocimiento de los distintos actores y el trabajo en alianza”.
La responsable de Organización de IU apostilló que “ahora toca bajar a pie de calle y desplegar en los territorios estos actos de reivindicación de la reducción de la jornada laboral, poniéndola en la agenda pública, pero sin olvidar también otros temas cruciales”, como “el acceso a la vivienda asequible, la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) o los derechos de la infancia”.
“Desde Izquierda Unida, con toda la humildad, también queremos aportar nuestro granito. El despliegue de Convocatoria por la Democracia pretende justamente eso, cambiar el estado de ánimo, devolvernos la confianza en que cuando trabajamos juntas, en pie de igualdad y de manera democrática y, por supuesto, con la mirada puesta en la gente, a las organizaciones sociales y sindicales nada parece imposible de cambiar”, apuntó.
