El diputado valenciano de Izquierda Unida y portavoz en temas de Juventud y hoy también de Cultura del Grupo Plurinacional Sumar, Nahuel González, ha mostrado su “satisfacción” en el Pleno del Congreso por la aprobación de “la primera ley orgánica de esta legislatura” -la ley por la que se regulan las enseñanzas artísticas superiores y equivalencias de las enseñanzas artísticas profesionales- que “va a mejorar la vida de los/as estudiantes, de los profesionales del variado sector artístico y de la industria de la Cultura, que es un orgullo para nuestro país”.
El parlamentario comenzó con una cita del poeta nacido y fallecido en Barcelona Joan Brossa: ‘el arte y la literatura nos permiten ver los ensanchamiento del horizonte hacia la libertad’, con la que señaló que “el arte nos acompaña desde que nacemos hasta que morimos, porque la Cultura es la esencia de nuestras identidades y de la forma en la que decidimos vivir”.
“Por eso hoy -dijo vehemente-, con la cabeza alta, agradecemos y mejoramos derechos para los creadores y creadoras, escritores, profesionales de la danza, del sector audiovisual, actores y actrices de arte dramático, conservadores y restauradores, músicos de todos los ámbitos y trabajadores de las artes plásticas”.
No obstante, antes de exponer el apoyo de su grupo a esta norma, Nahuel González abrió un paréntesis para explicar por qué “necesito empezar diciendo que cuando llegué a este Hemiciclo me entusiasmó la posibilidad de legislar, de trabajar para otorgar derechos y libertades, mejoras para la gente común, para la mayoría. Pero estos días he sentido, hemos sentido, vergüenza. El día de ayer fue un día dramático para este Hemiciclo, un episodio bochornoso para la historia de nuestro país. Ya está bien”.
El diputado del grupo de Sumar denunció que la ciudadanía “merece más, merecen debates productivos y no la constante crispación, y una oposición que no quiere estar a la altura”, tras los insultos y mentiras vertidos ayer por PP y Vox durante una más que crispada sesión de control al Gobierno en la Cámara Baja”.
“Hago un llamamiento a que cambiemos la dirección en el caos reinante del ruido y lo llevemos al terreno de la política útil. Eso pedimos desde nuestro grupo, que llevemos el trabajo a las leyes y medidas que permitan avanzar a nuestro país, a la gente común. Para eso hemos venido aquí, señorías”, indicó.
Centrados en la ley -que salió aprobada por 175 votos a favor, 32 en contra y 139 abstenciones- su objetivo es regular ‘las enseñanzas artísticas superiores, sus centros, su profesorado, así como el establecimiento de los derechos y deberes del estudiantado’, además de establecer determinados aspectos relativos a la organización y equivalencias de las enseñanzas artísticas profesionales aún no desarrollados por la Ley Orgánica de Educación.
González valoró que cuando se apruebe de forma definitiva “esta ley impactará en más de 140.000 estudiantes, en 14.000 docentes y mejorará sensiblemente un sector que emplea a 690.000 personas, el 3,5 % del empleo promedio de nuestro país”.
Expuso que “basta un dato para que nos hagamos una idea de la importancia económica de la ley: el sector de la agricultura, la pesca y la selvicultura representa el 2,3% el PIB (cifras de 2022 de Eurostat, la Oficina Estadística de la Comisión Europea), mientras que el sector del que esta norma se ocupa supone el 3,3% del PIB. Pocas bromas con esto, porque el impacto económico de esta norma será muy positivo”.
La nueva norma refuerza que “los centros que imparten enseñanzas artísticas garanticen la formación de profesionales altamente cualificados, que ejercen posteriormente las industrias culturales y del conocimiento”. Ello contribuye al “crecimiento económico del país”, entre otras razones porque “hay 128.741 empresas cuya actividad económica principal es la cultural. Suponen el 3,8% de las empresas recogidas en el Directorio Central de las Empresas, elaborado por el INE”.
Para González, “hoy venimos a hacer justicia” con el texto aprobado, tanto en “las formas como en el contenido”. En las formas, “porque esta ley viene de la mano de las principales asociaciones y federaciones del ámbito artístico, sindicatos, comunidades autónomas, asociaciones de estudiantes, docentes y centros, y ha recibido el respaldo mayoritario del sector”.
Se congratuló también de que tenga “el respaldo mayoritario de esta Cámara, en momentos donde es muy difícil lograr consensos”, si bien denunció que “la extrema derecha, una vez más, se pone de espaldas a un sector que considera hostil y dice una vez más como en mi tierra, en Valencia, que la Cultura solo puede ser lo que ellos dictan, el espectáculo feudal de torturar un animal, censurando la libertad de expresión y poniendo mordaza a cantantes, actrices o escritores”.
En alusión a los ultras de Vox, indicó que “no les gusta la Cultura, la libertad y tampoco otorgar derechos sociales y laborales. No hay otra explicación de que hoy voten en contra de esta ley”.
El diputado de IU dedicó un emocionado recuerdo “al compañero y ex diputado Joan Mena, que junto con otros muchos compañeros, trabajaron esta ley”, que homologa las enseñanzas artísticas superiores al Espacio Europeo de la Educación Superior, equiparándolas a las universitarias y a las enseñanzas profesionales, lo mismo que las enseñanzas artísticas profesionales lo estarán al Catálogo Nacional de Cualificaciones Profesionales.
“Gracias a esto -explicó González-, también los estudiantes tendrán mayor facilidad para realizar parte de sus estudios en otro país europeo y para poder ejercer su profesión fuera de nuestras fronteras”.
La ley introduce la modalidad dual, “por la que podrán realizar parte de su formación como prácticas en empresas, instituciones y cotizarán a la Seguridad Social”, además de que resultará más sencillo que “los estudiantes de enseñanzas artísticas superiores reciban una beca en las mismas condiciones que los universitarios, incluido el pago de las tasas de matrícula, que suelen ser muy elevadas y que hasta ahora no se compensaban” y “se reconoce el paro académico y el derecho a la huelga en el alumnado”, añadió.
En cuanto al profesorado de los centros públicos, la norma “favorece su actividad investigadora y su contribución a la creación artística”. Se crean cuatro nuevos cuerpos docentes: de profesores y catedráticos de enseñanza superiores, y de profesores y catedráticos de enseñanzas profesionales, además de los maestros de taller en enseñanzas artísticas, “en los que la integración será voluntaria y habrá un amplio calendario transitorio para hacerlo”.
Entre las novedades “está la creación de nuevas enseñanzas, como la audiovisual, la escritura creativa, y también abre la puerta a la incorporación del circo con las artes circenses, que merecen todo el reconocimiento, y que algunas leyes autonómicas contemplan, como la valenciana y la catalana”.
El diputado de IU incidió en que cuando la ley entre en vigor “la vida de miles de trabajadores y trabajadoras de la cultura, de estudiantes y de futuros creadores será mejor”, por lo que no olvidó tampoco agradecérselo “a las entidades, escuelas superiores, asociaciones y sindicatos por ser parte del proceso y parte de la solución”.
Nahuel González concluyó dedicando emocionado su intervención a “los miles de exiliados, a los artistas, escritores, artistas plásticos y actrices exiliados durante muchísimos años, especialmente a la memoria de Josep Renau, de Federico García Lorca, del propio Picasso o de artistas como Remedios Vara, pintora, exiliada en México, que ojalá hubiesen visto la luz de esta ley”.