Hoy 18 de octubre Francia está en Huelga General, que conforma una jornada de lucha que se une a la dinámica que las personas trabajadoras del país vecino vienen realizando, con éxito, en las últimas semanas (concentraciones, paros sectoriales, manifestaciones) y que reflejan un plante de firmeza ante las terribles consecuencias que las políticas liberales de Macrón está teniendo en la gran mayoría de la ciudadanía Francesa.
Los empresarios galos llevan meses bloqueando la negociación colectiva, condenando a las personas trabajadoras a ver como la inflación que el aumento de los beneficios empresariales está provocando, afecte gravemente a su poder de compra.
Paradójicamente en aquellos sectores donde los beneficios han sido altísimos en los últimos años (especialmente en las multinacionales de hidrocarburos) con total permisividad por parte del Gobierno conservador Francés, en el momento que los sindicatos han convocado huelga para exigir un aumento salarial acorde con la inflación, el mismo Gobierno ha intervenido para vulnerar el derecho de huelga y reducir el impacto de esta. La derecha francesa ejecuta así una vulneración que ya ha sido condenada en otras ocasiones por la OIT.
A esta lucha para conseguir mejoras salariales, se han unido los jóvenes estudiantes para mantener sus condiciones de vida y estudio, así como las escuelas de formación profesional.
La situación en España es similar respecto al bloqueo de la negociación que la CEOE está llevando como estrategia y que ayer mismo denunciaba la Ministra de Trabajo y ha llevado a CCOO y UGT en España a establecer un proceso de movilización, en el que el próximo 3 de noviembre aparece como el hito más cercano.
Izquierda Unida, tiene claro que en un periodo donde las rentas del trabajo han ido perdiendo peso frente a las rentas del capital, las políticas a llevar a cabo son las que intervienen en beneficio del mantenimiento de derechos y del poder adquisitivo de la mayoría social del País; desde los pensionistas hasta los estudiantes y por supuesto a las personas trabajadoras que son el verdadero generador de riquezas.
Los partidos políticos de la Izquierda Francesa, así como los sindicatos de clases galos, tienen todo el apoyo del espacio político de Izquierda Unida, ya sea tanto en el apoyo con nuestra presencia en la calle, como en las iniciativas políticas que trasladamos en el Gobierno de la Nación, donde cogobernamos, como en las propuestas donde somos minoría, sea de ámbito autonómico, local o en las instituciones europeas.
VIVA LA LUCHA DE LA IZQUIERDA Y SINDICATOS FRANCESES
