El portavoz adjunto de Unidas Podemos, Enrique Santiago, tachó anoche en el Pleno del Congreso de “bulo” en sí misma la moción defendida por los ultraderechistas de Vox en la que presentaban sus supuestas alternativas a las, según su propia definición, ‘medidas que va a adoptar el Gobierno en el ámbito de la libertad de expresión’.
Santiago contrapuso esta realidad a la “realidad paralela” que conscientemente difunde Vox “propia de terraplanistas y conspiranoicos”, mientras “atacan a cualquier medio que no tache de criminal al Gobierno”.
Advirtió de que el partido de ultraderecha “haciendo uso de su libertad de expresión, denuncia a diario que el Gobierno impide la libertad de expresión” e indicó con ironía que “los señoritos de Vox creen que solo tienen derechos, no obligaciones”, Mientras, se encargan de “citar argumentos jurídicos a medias” para tratar de justificar sus acciones, entre ellos el artículo 20.1.d de la Constitución, el artículo 19 del Pacto de Derechos Civiles y Políticos o el artículo 10 del Convenio Europeo de Derechos Humanos, “todos ellos sobre libertad de expresión”.
El también portavoz parlamentario de Izquierda Unida en el Congreso explicó que existe “un amplio consenso sobre la proliferación de bulos y mentiras durante el estado de alarma”, buena parte de ellos “con fines políticos”. Esto es algo que amenaza “el acceso a la información veraz y diversa” que “es un pilar de la democracia”. De hecho, el 88% de los españoles piensan que la desinformación es un problema.
Enrique Santiago dejó claro que “la estrategia nacional de lucha contra la desinformación” puesta en marcha por el Gobierno de coalición “no va a censurar ni a limitar la libertad de expresión”, todo lo contrario. De ahí que avisara de que a Vox lo que realmente le “preocupa” es que “se detecte el origen de la desinformación y la manera en la que se produce y difunde, que se ponga en evidencia que son muy mentirosos”.
El portavoz adjunto de Unidas Podemos detalló a lo largo de su intervención algunos de los cientos de ejemplos de mentiras y bulos lanzados por la extrema derecha y la derecha en los últimos meses, que van desde el que “consistía en atribuir al Gobierno la responsabilidad de lo ocurrido en las residencias de mayores”, el que difundieron al unísono Vox y el PP sobre que “las comunidades autónomas podrían ocupar viviendas privadas”, al “colmo de la mentira” con una foto de un artista que el partido ultraderechista manipuló para que la Gran Vía apareciera llena de ataúdes con muertos por la pandemia.
Insistió en que en los planes del Gobierno “no existe mecanismo alguno de control de la opinión pública, ni limitación alguna de la libertad de expresión”, ya que sus propuestas tienen la finalidad de “salvaguardar el derecho a transmitir y recibir libremente información veraz, garantizar el ejercicio de libertad de expresión de los ciudadanos a través de redes sociales”.
Mientras, “la derecha ‘trumpista’ como ustedes -dijo a la bancada de Vox- no acepta sus derrotas electorales, no reconocen el derecho a gobernar a la izquierda, les cuesta aceptar la democracia”. Son los mismos que, pese a sus supuestas convicciones religiosas, “mienten”, como hicieron al afirmar “que la ley de eutanasia obliga a los españoles a pedir la muerte, igual que antes dijeron que la ley del aborto obligaba a abortar todos los embarazos o que la ley de divorcio obligaba a divorciarse”.