El responsable federal de Política Internacional de Izquierda Unida, Francisco Pérez Esteban, denuncia que “los escuadrones de la muerte incrementan su actividad en Colombia de manera que, aprovechando las medidas de cuarentena acordadas en este país para frenar el Covid-19, asesinan aún con más impunidad a dirigentes populares y activistas sociales”.
Pérez Esteban incide en que según las denuncias que reciben de diferentes organismos de Derechos Humanos y ONGs que trabajan en las zonas afectadas “esta situación ya de por sí peligrosa e inadmisible podría agravarse en los próximos días si no se produce una actuación adecuada, para lo que se necesita también la reacción internacional”.
Recuerda que “el presidente Iván Duque es absolutamente incapaz de responder a los crímenes de los grupos paramilitares desde que inició su mandato. La mayor parte de los asesinatos quedan en la impunidad sin que los máximos responsables políticos de Colombia muevan un dedo para impedirlo”.
“De esta forma -denuncia el responsable de Política Internacional de IU- se incumplen escandalosamente los compromisos más importantes firmados por el Estado colombiano en los Acuerdos de Paz de La Habana, entre ellos la creación de una Fiscalía Especial para la persecución del paramilitarismo”.
Del mismo modo, IU denuncia los impunes asesinatos de varios ex miembros de las FARC -al menos 15 en lo que va de año-, todos ellos firmantes de los Acuerdos de Paz de 2016. Entre los últimos casos se encuentran Astrid Conde y Antonio Albeiro Gallego, asesinados en Bogotá y en el departamento de Meta.
Pérez Esteban detalla que “la política de violencia sistemática y de exterminio contra integrantes de este partido político se afianza a pesar de las denuncias realizadas por Naciones Unidas desde diciembre pasado. Desde que se firmaron los Acuerdos de Paz ya son cerca de dos centenares las personas asesinadas, en estos casos todas ellas en proceso de reincorporación a la vida civil y laboral”.
Añade que “además de incumplir los acuerdos, el Gobierno colombiano ha dejado en el aire la excarcelación de cientos de presos políticos y, cuando lo hace, aprovecha la situación de confinamiento para trasladar de forma arbitraria a las personas afectadas por estas medidas a lugares desconocidos”.
Por ejemplo, tal y como denuncia la organización ‘Libres e Inocentes’, se ha constatado la ‘desaparición’ de Moisés Quintero, José Ángel Parra, Oscar Rodríguez, Lina Jiménez, Lizeth Rodríguez y Alejandra Méndez, tras salir de las prisiones de La Picota y de El Buen Pastor en Bogotá.
Francisco Pérez Esteban señala que “exigimos al Gobierno colombiano que informe inmediatamente sobre el paradero de todas estas personas, como haría cualquier institución que se tenga por democrática”.
Por otra parte, el dirigente de IU muestra también el respaldo de esta formación a que se abra una investigación “en relación a las muertes al comienzo de esta semana de más de una veintena de presos tras las protestas de los reclusos contra el Gobierno por el hacinamiento y la falta de medidas contra el coronavirus en las cárceles del país”.