El coordinador federal de Izquierda Unida y cabeza de lista de Unidas Podemos por Málaga al Congreso, Alberto Garzón, ha advertido hoy de que los servicios públicos esenciales, como la sanidad, sufren a día de hoy un “acoso sistemático” por parte de las formaciones de derechas que apuestan por “políticas neoliberales y de recortes”. De ahí que haya situado a su coalición electoral como la única que “tiene como prioridad el blindaje de los servicios”.
Garzón, en un encuentro con los medios de comunicación en Málaga, secundado por el coordinador general de IU Andalucía, Toni Valero, y distintos/as candidatos/as de la lista malagueña al Congreso, como Eva García Sempere, alertó de que estos ataques empezaron hace tiempo y que en casos como el de la sanidad pública está siendo “deteriorada en los últimos años como consecuencia de los recortes sistemáticos por parte del Estado y de la Junta andaluza”.
Para el máximo responsable federal de Izquierda Unida, lo que ahora hacen PP, Ciudadanos y Vox desde el Gobierno andaluz no es nuevo y hay suficientes antecedentes de ello en “la doctrina neoliberal del PP” que ya ha impuesto “en otras comunidades, donde ha deteriorado profundamente y gravemente la sanidad”, con constantes “favores a la sanidad privada”.
Alberto Garzón destacó que la inversión la Atención Primaria debe ser “una necesidad estratégica para el siguiente Gobierno” a nivel estatal, por lo que entre las prioridades de Unidas Podemos está responder a la necesidad de “más y mejor financiación” para la sanidad, lo que pasa por una “reforma fiscal progresiva que sirva para fortalecerla”.
Detalló que “fortalecer la Atención Primaria supone mejorar la vida de las familias, facilitar que las enfermedades no empeoren y que no resulte mucho más caro su tratamiento”.
El cabeza de lista al Congreso por Málaga ilustró estas valoraciones con el caso de la grave intoxicación por carne mechada que estalló este verano en Andalucía y que se extendió por toda España. Consideró que ejemplos así ponen de manifiesto “las deficiencias importantes de nuestro sistema público de salud pero, sobre todo, el deterioro en el acceso de las familias trabajadoras a un servicio tan básico como la sanidad”.
“Estamos ante una estrategia preconcebida por el Gobierno de la Junta de Andalucía y de otros -dijo-, encaminada a beneficiar a la sanidad privada y generar incentivos para que las familias con recursos puedan irse a ella, mientras que el resto va a una sanidad pública más deteriorada”.
Esto incluye que para la derecha el modelo sanitario sea “el modelo de urgencias” que hace que las familias tengan que acudir a ella para ser atendidos, lo que “encarece la sanidad y hace que se atienda a la persona en perores dificultades”.
En otro orden de cosas, Alberto Garzón abogó también y estimó “absolutamente necesario” subir los salarios en España, ya que “la mayoría de familias trabajadoras no pueden llegar a fin de mes y no pueden acceder a unos servicios fundamentales para desarrollar una vida digna”.
Esta propuesta incluye también que la subida alcance al “salario mínimo” (SMI) o que se logre una mejora a través del “Plan de Empleo Garantizado que hemos propuesto”. En este punto, se comprometió como una “prioridad” a subir el salario mínimo hasta los 1.300 euros.