La eurodiputada de Unidas Podemos y portavoz de Izquierda Unida en el Parlamento Europeo, Sira Rego, ha presentado a la comisión de Libertades, Justicia e Interior dos proyectos piloto que buscan que la Eurocámara dé cobertura legal a las activistas y ONG que trabajan en el mar rescatando personas migrantes y refugiadas, y la puesta en marcha de una operación civil europea de búsqueda y rescate en el Mediterráneo. La propuesta prevé que ambos proyectos se incluyan en el presupuesto de 2020 y sean financiados con una dotación de más de 100 millones de euros.
Rego ha hecho pública esta iniciativa esta mañana durante una rueda de prensa en Bruselas junto a los abogados Juan Branco y Omer Shatz, que forman parte del grupo de juristas que ha denunciado a la Unión Europea ante la Fiscalía de la Corte Penal Internacional por sus políticas migratorias en el Mediterráneo.
El primer proyecto “está concebido para evitar que el Salvini de turno pueda seguir secuestrando barcos de rescate y criminalizando a las y los activistas y cooperantes que están trabajando en el Mediterráneo salvando vidas”. Se trata de “una medida que anunciamos la pasada semana en Estrasburgo durante la presentación de nuestra candidatura a la presidencia del Parlamento Europeo” y que persigue “que no haya más casos como el de la capitana Carola Rackette”. “No es posible que toda Europa se indigne por lo que pasó en Italia con el Seawatch 3 y que luego, a la hora de la verdad, a la hora de apoyar a las personas que se juegan la vida por salvar la de otras, no se haga nada”, apunta. En la propuesta, Rego propone abrir una línea de crédito de 400.000 euros para todo el año 2020.
En lo que se refiere al segundo proyecto, Rego señala que “es un tema que venimos reclamando desde hace años: queremos que las labores de búsqueda y rescate de personas migrantes la hagan civiles y no militares”. La iniciativa, con una dotación de 100 millones de euros, incluye la puesta en marcha de una operación europea de búsqueda y rescate en el mar desarrollada por un cuerpo civil, y no por las fragatas y patrulleras de la OTAN. “La desmilitarización del Mediterráneo es prioritaria. Es necesario que las tareas de salvamento las lleven a cabo personas no militares preparadas para afrontar casos como los que estamos viendo a diario”, insiste.
El recorrido parlamentario que se abre ahora es relativamente corto. Los dos proyectos han sido presentados esta semana a la comisión de Libertades de la Eurocámara. A partir de septiembre se someterá a votación su inclusión en la propuesta que el propio comité hará para los presupuestos del próximo año. De ser aprobados, el siguiente paso es un análisis jurídico sobre las posibles incompatibilidades de competencias que puedan surgir. Pasado este trámite, se incluiría en los presupuestos que el Parlamento Europeo debe aprobar antes de finales de año.
“Sabemos los números con los que contamos en el Grupo de la Izquierda Unitaria Europea, pero como poner esto en marcha es solo una cuestión de voluntad política, creemos que ha llegado el momento de poner las cartas encima de la mesa. Queremos que todos esos grupos parlamentarios que se indignan cada vez que una persona muere ahogada en el mar digan si están dispuestos a darle un vuelco a las políticas que hasta ahora está planteando la UE y han convertido el Mediterráneo en un mar de muerte”, puntualiza. Es “algo sencillo: de nada sirven las quejas si no aprovechamos los pocos resquicios que deja esta institución para tratar de incidir y acabar con una situación criminal”.